domingo, junio 10, 2007

Plazoleta de San Francisco

Hace algunos meses atrás, leyendo sobre Buenos Aires y su primer virreinato, me encontré transportándome inevitablemente a las turbulentas, misteriosas y cuantos adjetivos calificativos cada uno de ustedes hayan llegado a darle a las cuadras de nuestro -en todo sentido-movilizador microcentro.

Esta zona fue el epicentro SIEMPRE de los primerísimos y posteriores años de la conquista, virreinatos y demases episodios que nos formaron como país.

Yo desconocía que la “Pirámide de Mayo”, ubicada en “Plaza de Mayo”, ex “Plaza de la Victoria” fundada en el año 1811, que originalmente fuera un obelisco construído para conmemorar el año uno de la Libertad, y que luego fuera cubierto en 1856 por la actual pirámide que hoy conocemos, (obra de Prilidiano Pueyrredón), había estado rodeada originalmente por 4 estatuas, que representan la Astronomía, la Industria, la Geografía y la Navegación.

Las 4 estatuas femeninas originales, fueron obras del escultor Francés, Joseph Dubourdieu, realizadas de un material llamado “tierra Romana al esterior, y su cuerpo de cal, ladrillo y hierro (Julio E. Payró, de su libro “Prilidiano Pueyrredón, Joseph Dubourideu. La pirámide de Mayo y la Catedral de Buenos Aires”), que se especula se extinguieron, debido al material en el que fueron realizadas.

En el año 1875, fueron reemplazadas por estas que hoy apreciamos en la plazoleta, y que provenían de la fachada del Banco de la Provincia (de Enrique Hunt).

Hacia 1912, fueron removidas cuando la “Pirámide de Mayo” fue trasladada hacia el centro de la plaza. En esta remodelación, las estatuas fueron llevadas a depósitos municipales y se mantuvieron allí, hasta que el Arquitecto José María Peña, gestionó sus traslados en el año 1973, a la “Plazoleta de San Francisco”, frente a la Iglesia de San Francisco.

Y allí estan, ocultas en primavera por frondosos árboles, y en otras estaciones, a la costumbre urbana de caminar sin mirar o mirar sin pensar, en razones e historias desconocidas.



La Astronomía



La Industria



La Geografía



La Navegación


lunes, diciembre 11, 2006

La Casona de Mansilla

Como en tantos libros y artículos, se desprenden personajes y lugares, algunos conocidos, otros no, y para sorpresa mia, me encuentro lugares que estan muy cerca y aún (por suerte) se “conservan en pie”. Así es como elijo lo que voy a fotografiar.

La Casona de Mansilla, esta muy cerca de donde vivo, y no sabía que personajes había albergado en sus años de buen uso, aunque al mirarla, y posteriormente descubrirla, no me resultó difícil creer que esta Casona, alguna vez, fue una de las grandes mansiones de Buenos Aires.

Lucio V. (Victorio) Mansilla, (Buenos Aires, 1831 - París, 1913) hijo de el general Lucio Mansilla y doña Agustina Rosas, hermana del "Restaurador", conocida como "la belleza de la federación", fue militar, político, escritor, periodista y viajero infatigable.

Se relacionó con la nobleza europea y con otra gente sin blasones, pero no de menos real linaje: los indios. Autor de "Una excursión a los indios ranqueles", “De cómo el hambre me hizo escritor”, -entre otras-, participó en la guerra del Paraguay, en una curiosa alternancia entre la actividad militar y el periodismo, y su labor como diputado y como gobernador del Chaco, designado por su amigo Nicolás Avellaneda.

Esta casona finamente Italiana, nació como “Villa Esperanza” entre 1870 y 1880, tiene una superficie de 2633 metros que se mantiene intacta. Según he leído, Mansilla la usaba como quinta de fín de semana y casa de veraneo, aprovechando la fácil comunicación con lo que era Buenos Aires y pasó a ser “el centro” tras la federalización.

Fue vendida por Mansilla a la familia Panela, (sólo lo encontré en una fuente, lo cual no hace al dato seguro) y posteriormente alquilada por la familia al Gobierno, funcionando allí desde el año 1915 a 1982, el Normal 10. Defendida y reclamada por vecinos, estuvo varios años inútilmente en venta y fue ocupado por la asamblea local hasta ser desalojada.

En el camino, fue codiciada por los Macri, que quisieron montar una sede de una universidad privada en el edificio y construir torres en el terreno. Estos proyectos movilizaron a los vecinos, buscando mantener la integridad del predio y sobre todo su uso público.

La casa fue catalogada por el gobierno porteño con nivel de protección estructural en 1998 y en 2000 fue declarada monumento histórico nacional, aunque sea tan notorio que no saben que hacer con ella.

Según información que recaudé entre varias lecturas, la Casona posee más de 20 habitaciones, varios baños, conserva aún su original piso de madera, como sus barandas, puertas interiores y hasta los altos espejos en las curvas de las escaleras y no presenta graves problemas estructurales a pesar de los años.

Aunque no sea este el único caso en el que el patrimonio se encuentra deteriorándose esperando decisiones, ustedes como yo, seguramente llegaremos a la misma triste reflexión, la injusticia de ver dormir, la gran Casona, con tantas ventanas, tantos balcones, tanto patio, y siendo aprovechada hoy, únicamente, por más de 60 gatos que viven en ella y son alimentados por vecinos, y atendidos periódicamente por una veterinaria que se acerca al predio.

“Disfruten” estas fotos, imaginando el esplendor en el que fue habitada, “La Casona de Mansilla”.

Hasta el próximo posteo!

Ubicación: Tres de Febrero entre Olazábal y Blanco Encalada.
Barrio de Belgrano - Cdad. Autónoma de Bs As. - República Argentina


Fachada Principal







Contrafrente











martes, noviembre 14, 2006

Esta semana leyendo algunos artículos, volví a encontrarme con la historia de los transgresores O’Gorman-Gutierrez. Su historia se desarrolla durante el gobierno de Juan Manuel de Rosas (1829-1852) y desata el comienzo del fín de la era Rosista.


En el año 1847, Camila contaba con 19 años y vivía junto a su familia, próxima a la Parroquia del Socorro. El lugar era un tranquilo barrio de quintas arboladas entre cuyo verdor se destacaban las elegantes torres del templo. Camila, hija de una familia aristocrática, educada según las tradicionales y severas consignas de su padre, que postula la obligación de la virginidad y la obediencia a las virtudes hogareñas, se enamora del joven cura jesuita.

Ladislao Gutierrez, había llegado a Buenos Aires, unos años antes desde Tucumán. Decían que era "juicioso y lleno de aptitudes" y venía a Buenos Aires para seguir la carrera eclesiástica. Ordenado sacerdote a los veinticuatro años, Ladislao Gutiérrez fue designado párroco en la iglesia del Socorro.

Como tantos lugares que uno camina “acostumbrada” en esta ciudad, me encontré con que la Parroquia Nuestra Señora del Socorro, ubicada en calle Juncal 888 y Suipacha, fue el lugar donde por primera vez repararon uno en el otro.

Viven este romance con culpa hasta que deciden escaparse el 11 de diciembre de 1847, en dirección a San Fernando, bajo los nombres de Valentina Desan y Maximo Brandier. Allí embarcaron con la complicidad del patrón del barco y llegaron a Goya, Corrientes. Al llegar con su nueva identidad pudieron tomarse un respiro y prepararse para la última etapa: Brasil. Mientras tanto, para ganarse la vida abrieron una escuela para niños, la primera que existió en esa pequeña ciudad.

Pudieron vivir cuatro meses en una relativa felicidad, olvidando la persecución de que eran objeto. El 16 de junio ocurrió el desastre cuando encontraron en una casa de familia a un sacerdote irlandés que conocía a Gutiérrez.

Son descubiertos, detenidos y encarcelados. Rosas los manda a ejecutar, a pesar de que Camila estaba embarazada. El dictador, no muestra piedad porque la historia de Camila y Ladislao se había vuelto un escándalo.

El 18 de agosto de 1848, Camila O’Gorman y Ladislao Gutierrez son fusilados en Santos Lugares.

Horas antes, el jesuita le había escrito a quien consideraba su esposa :
"Camila mía :
Acabo de saber que mueres conmigo.
Ya que no hemos podido vivir en la
tierra unidos, nos uniremos en el
cielo ante Dios.
Te abraza...
Tu Gutierrez"

Comparto con ustedes esta información, y las fotos de esta Parroquia, que quizás algunos sepan, y otros no, que caminamos por el mismo lugar que estos personajes lo hicieran, hace tantos años antes.


Observaciones: Iniciada como modesta capilla en 1783, pasada la primera mitad del siglo XVIII, con su correspondiente camposanto lindero (conocido como "del Socorro") según costumbre de la época. Se construyó sobre tierras que donara Alejandro del Valle, un español que poseía una quinta en las proximidades. El cementerio era protestante, y se hallaba al costado de esta Iglesia, donde hoy se alza un Hotel.







miércoles, octubre 25, 2006

Edificio Otto Wulf

Construído por encargo del Arquitecto Otto Wulf al Arquitecto Danés Morten F.Rönnow. Fue inaugurado en el año 1914.
Consta de 10 plantas y está ubicado en la Av.Belgrano 601 esq. Perú 375/99 del Barrio Porteño de Montserrat.

Características:
Su autor despliega un repertorio ornamental plagado de símbolos y asociaciones:Cada uno de los colosos de las ménsulas antropomorfas fue hecho a imagen y semejanza de quienes construyeron la obra (el herrero, el albañil, el carpintero, el propio arquitecto). En su basamento y remate hay figuras de la fauna argentina, como cóndores, pingüinos, osos, lechuzas, y hasta de la población autóctona, como caciques e indios. Esta presencia se refleja en sus formas y significados: la cúpula más alta, coronada por un Sol, representa la imagen del Kaiser Francisco José I de Habsburgo; mientras que la menor posee una corona y una luna (luego perdida) que simbolizan la figura de la Emperatriz (SISSI) Isabel de Possenhofen, Reina de Baviera, Austria. Su propietario original fue el Empresario Naviero, cónsul del Imperio Austrohúngaro en Buenos Aires (1899), Nicolás Mihanovich. En sus oficinas funcionó la Legación del Imperio Austrohúngaro hasta su disolución en 1918. En esta intersección estuvo emplazada, en 1782, la casa del virrey Del Pino (su mandato fue entre 1801 y 1804) y a su muerte vivió su viuda, que como era muy anciana, tomó el nombre popular, de casa de la Virreina Vieja. En esa azotea se libró, el 5 de julio de 1807, un encarnizado combate, cuando los ingleses quisieron tomar por asalto la vivienda. En las proximidades de esta casa, en la calle Defensa 346/356, se levantaba la casa de don Bernardino Rivadavia, primer presidente argentino (1826-1827), casado con doña Juana del Pino (hija del virrey Del Pino) y donde transcurrieron los mejores años de su actuación política. Luego el edificio perteneció al padre del obispo Medrano, quien hizo grabar su escudo de familia sobre la puerta principal.


Más tarde adquirió la propiedad la familia Cazón
y años después funcionó el Banco Municipal de
Préstamos (el Monte Pío).
La fachada actual luce una placa con leyenda y figura de la antigua casa, y en ella se lee:
El Banco de la Ciudad de Buenos Aires en su centenario recuerda la sede de su precursor "Monte de Piedad" instalado en este solar de la casa de la Virreina 23/5/1978.